Aprieto el botón de luz de mi reloj y marca 5 minutos para la una, sólo 10 minutos más y por fin libre de esta prisión, trato de distraerme en algo, con mis pulgares empiezo a hacer hilitos de pritt y los pego en la base, en eso suena la estruendosa chicharra, aviento como puedo mis cuadernos y mi estuche, tengo que apurarme, estos malditos niños me van a ganar, sino otra vez el señor me dirá. “No pus (sic) ya no hay, a ver si a la otra sales más temprano chamaco”. Salgo y están todos amontonados, como puedo me abro paso a punta de mochilazos, tengo que cruzar un mar de compañeros, mochilas y señoras que todavía traen tubos en la cabeza, y cargan unas bolsas tamaño familiar, que me obstaculizan llegar a mi meta, driblo una lonchera más y finalmente estoy en primera fila, justo frente al señor que pone su puesto de dulces afuera de mi escuela, saco mi moneda plateada de doscientos pesos y pido que me de dos cazuelitas de chile ¡Al fin la gloria!
Salgo como puedo de entre la multitud, debo darme prisa, todavía me falta comprar mi bolsa de cacahuetes con sal, chile y limón, y mi mamá no tarda en llegar, si me ve comiendo dulces me regañará porque ya después no quiero comer y me dirá lo mismo de siempre: “Me la pase todo el día haciendo la comida para que tu no quieras comer, a la próxima hago como las otras mamás fodongas de tus compañeros, te voy a dar dinero para que te llenes de pura botana y así no me haces perder el tiempo cocinando” (Siempre esperé con alegría a que llegará ese día y pudiera darme un festín de botana patrocinado por mi “má”, ese día nunca llegó).
¡Mmmm ¡ no entiendo, ¿Por qué mi mamá me regaña por no comer? Si al final de cuentas si no como mi hermana se lo acaba, ella siempre tiene hambre.
En eso escuchó el claxon del coche, es mi mamá, rápidamente voy a tirar toda la evidencia de lo que comí al bote de basura que esta junto a la puerta de la escuela, trato de correr hacia el auto pero no puedo estoy demasiado lleno, no creo poder comer nada más probablemente en toda mi vida, me cuesta trabajo moverme y respirar, me subo al coche como si no hubiera pasada nada, me saluda mi mami, me pregunta que como me fue, no me deja que le conteste y me dice: “¡Que crees! Mientras esperamos la media hora a que salga tu hermana de la escuela, te puedes comer un tamalito y un atole que compre en la flor de lis, pero no te vayas a llenar que ya hice la comida”. (En ese momento de mi vida aprendí una gran lección, el karma existe jajajaja).
Ya en la casa, me apuro a terminar de comer de mi sopa con “Quesito Mío”, porque ya inicia M.A.S.K, le doy las gracias a mi mamá por la comida, corro a mi recamara por mi Rhino (Un tráiler de esta caricatura que apretabas un botón y la defensa delantera salía impulsada para pegarle a los otros autos, si pulsabas otro botón salía de la cabina un cohete disparado hacia arriba), mientras veo la caricatura me viene a la mente una idea, tal vez de grande podría dedicarme a ser un piloto de carreras mientras combato a una organización de criminales, en la noche que llegue mi papá le preguntaré si me puedo dedicar a eso.
Mi mamá me grita desde la cocina que terminando esa caricatura que apague la “tele”, porque tengo mucha tarea, y que primero es la escuela; maldigo mi suerte, porque no es viernes, así podría disfrutar ver Mazinger Z, G.I. Joe, He-Man y los Amos del Universo, El Jinete Sable, Los gatos Samurai, pero bueno si me apuro puedo alcanzar a ver El Conde Patula, después de eso 15 minutos de un programa que se llama Partidos Políticos, me aburre, ya quiero que empiece los Thundercats y los Silver Hawks (Los halcones galácticos), pero antes una hora de Batman (la serie en donde actuaba Adam West y salían los letreros de ¡Pow! ¡Kapow! ¡Zap!) O si me aburro pues le cambio a una caricatura que dicen que no es completamente para niños llamados Los Simpson, lo bueno es que ya pronto será fin de semana y así voy a poder ver temprano Los Caballeros del Zodiaco, espero que pronto mi papá me lleve a la Mercería del Refugio, o a “Ara”(eran jugueterías) y me regale a Pegaso (nunca lo encontré y me acabaron regalando la armadura de Géminis).
¡¡¡Eh por fin es sábado!!! , ahora sí puedo sacar mi Nintendo y ponerme a jugar Mario Bros., 1943, Battletoads, los dos juegos de las Tortugas Ninja, si lo juego me pondré mis sables de Leonardo y el antifaz de Donatello, que bueno que tengo el Nintendo, pero bueno también extraño el Atari 3600 de mi hermana, extraño jugar Pacman, Space Invaders, Popeye, lo bueno es que le regalaron un Sega System, cuanta tecnología trae lentes 3D, pero ella se la pasa jugando Alex Kidd.
Acabo de ver en una revista lo que va a traer el Super Nintendo, incluirá el Super Mario World, podrás montar a Yoshi, la mascota de Mario, además habrá un juego increíble llamado Castlevania y uno de carreras futuristas llamado F-Zero.
Hoy es domingo, mi mamá dijo que no puedo estar encerrado jugando solamente videojuegos, que tenía que salir a jugar con mi hermana y con mis vecinos, mi hermana me dice que sale a jugar conmigo pero con una condición, que pruebe uno de sus pasteles de chocolate que hizo en su horno mágico (era uno hornito que traía mezclas para hacer pasteles y funcionaba con un foco de 100 watts) gustosamente me lo como, después voy a cambiarme mis zapatos, esta vez tenía que dejarlos de lado, iba a andar en bicicleta y necesitaba unos tenis de hombre para esta tarea, mis Bubble Gummers que prenden atrás cada vez que camino.
Ya listo para salir, solo me falta ir por las bicicletas, en eso ¡Oh no! Me empieza a doler el estómago muy fuerte, le digo a mi mamá que me siento mal, me pregunta que fue lo que comí, inmediatamente de manera incriminatoria le digo: “Mi hermana me dio un pastel de chocolate salido de su horno mágico”, seguro mi hermana me quería envenenar, para que ella y mi hermana más grande recibieran toda la atención y cariño de mis papás, solo necesitaban deshacerse del hermano más pequeño. Ni mi mami ni yo creímos que los 5 tazones que me comí de cereal Pac-Man una hora antes haya sido el problema, la causa de mi dolor estomacal era el pastelillo que me dio mi malvada hermana. (De hecho cada vez que padezco del estómago, le digo a mi hermana, es por culpa de tu pastel que me comí cuando era niño, desde ahí siempre me enfermo).
Al siguiente fin de semana, ya sin enfermedad alguna y sin ningún requisito de ingerir algún alimento por parte de mi hermana, ¡A andar en bicicleta!
De hecho era la tercera vez que la uso, la mía todavía tiene las rueditas de entrenamiento, mientras que la bicicleta de mi hermana es más grande, es negra con amarillo, sin ruedas de entrenamiento y frena cuando haces los pedales hacia atrás, supongo que esta es la razón por la cual ella me enseña a andar en bicicleta, mi hermana es toda una profesional.
Mientras disfruto de mi paseo en bicicleta, se acerca mi vecino y me dice: ¡Como ves, unas carreritas en el estacionamiento del edificio!, en eso volteo a ver a mi hermana en busca de su consejo, y ella me dice: ¡Estás listo para competir! (Ahora que lo veo ese momento solo se compara cuando Yoda le dice a Luke Skywalker que ya no tiene nada más que enseñarle que ya casi es un Jedi).
Me coloco en la posición de salida junto a mi vecino, tanto de nuestro lado izquierdo como del lado derecho los autos de los vecinos estacionados y junto a cada coche, mis pequeños vecinos que querían ser testigos de esta carrera histórica, mi hermana se pone enfrente de los dos y dice: ¡En sus marcas, listos, Fuera!, estoy pedaleando con todas mis fuerzas, solo oigo como el piso de adoquín suena al compás de nuestro pedaleo, tengo que voltear a ver dónde está mi vecino, me va ganando por poco, tengo que pedalear más fuerte, lo estoy rebasando, tengo que esforzarme un poco más, se está quedando atrás le voy a ganar, mis 3 clases de ciclismo están rindiendo frutos, estoy en primer lugar, le estoy ganando, estoy venciendo a mi vecino que siempre dice yo soy más grande que tú, si a mi vecino que me dice tu bicicleta tiene rueditas de entrenamiento y la mía no, si a mi vecino que siempre……¡Oh espera que pasa!, mi bicicleta va muy rápido el manubrio no responde y los adoquines me hacen brincar mucho.
¡No frena!, ¿Qué hago? ¡Voy demasiado rápido! ¡Crashhhhh!, salgo volado, estoy abriendo mis ojos y veo a mi hermana con cara de preocupada, me pregunta que si estoy bien, le respondo que si, en ese momento lo único que pasa en mi cabeza es saber cómo fue que frene, en eso me levanto entre la multitud de niños (eran como 4), y veo mi bicicleta prácticamente estampada en el faro trasero de un coche, y a mi vecino gritándonos a mi hermana y a mí: ¡Van a ver los voy a acusar con mi papá que le rompieron la calavera trasera de su coche! (Segunda lección que el karma si existe jajaja, lo único bueno es que nadie gano, mi vecino en lugar de cruzar la meta y llevarse toda la gloria, prefirió ir corriendo a su casa de chismoso, lo único malo es que en la noche de ese día fue el papá de mi vecino a cobrarle la calavera a mis papás y después regañaron a mi hermana y a mí).
Semanas después, es viernes de nuevo y antes de irnos a dejar mi mamá a la escuela a mis hermanas y a mí, nos avisa que saliendo de la escuela iríamos a pasar el fin de semana con nuestros primos, estoy feliz y emocionado, lo único que quiero es que ya pase el tiempo de escuela y poderlos ver, ojalá pasemos antes al Videocentro y rentemos películas de Arnold Schwarzenegger, de Jean Claude Van Damme, de Steven Seagal me gustó su película Nico (Above the Law) pregunte a unos vecinos que están más grandes y dicen que esa forma de pelear no existe que es cosa de Hollywood (de hecho si existe se llama Aikido, por increíble que parezca ahora lo práctico y no porque me quiera parecer al Sr. Seagal) o de plano alguna de Sylvester Stallone, ¡Mmmm! Lo único malo cuando juego con mis primos es que nunca me dejan ser Rocky, siempre tengo que ser Ivan Drago, siempre quiero estar jugando con ellos cuando nos vemos, pero no siempre mis papás me dan permiso, porque cada vez que ellos corren siempre hay alguien que me empuja o me mete el pie y me caigo, y termino cortado de mis manos o de mis rodillas, aunque últimamente me he dado cuenta que me he caído y no hay nadie cerca cuando me pasa (Tenía el pie plano nadie me tiraba o me empujaba aunque en ese tiempo yo estaba convencido de que sí).
Espero nos compren Frutsis, para cuando ya estemos juntos nos los tomemos al revés y los que sobren los metamos al congelador, y ya con el envase vacío juguemos fut, pero siempre hay alguien que lo pisa y lo deja todo aplastado, con el Boing no se puede hacer eso, solo puedes inflarlo cuando ya está vacío y saltar encime de él, para que explote y todos se asusten.
Saliendo ahorita de la escuela, compraré aquí afuera unos aviones como de unicel que vienen en un sobre rojo y una hélice de plástico para que puedan volar, se los voy a regalar a mis primos; ojala antes de salir a carretera nos lleven a comer algo al Burger Boi (en uno de sus comerciales salía Salma Hayek de chavilla) o quizás al Tomboy o de perdida por las papas del Shakey’s y terminando por nuestro helado al Danesa 33.
Al siguiente día ya en casa de mis primos.
Que alegría le voy a pedir a mis primos que me presten su Avalancha, es el regalo que quiero pedirle a Santa Claus, mi mamá dice que es muy peligrosa yo no veo el porqué.
¡Ehh¡ mis primos me dijeron que si la puedo usar, ahora a pedirle permiso a mi mamá. De nuevo ¡Ehhhh! Mi mamá dijo que sí, pero con una condición, que la use mi hermana primero porque ella es más grande, que espere un momento en el patio mientras le avisa que salga a jugar con nosotros.
Tengo mucha emoción ahí viene mi hermana con uno de mis primos y cada uno trae una avalancha, me dicen que se van a echar unas carreritas, que me fije para cuando me compren la mía; voy corriendo al principio del patio para tener una mejor vista de la carrera, los dos colocan su respectiva Avalancha toman vuelo y ahí van los dos, van casi empatados, están llegando casi al final del patio tienen que frenar sino chocaran con la pared, mi primo hábilmente alza la palanca que está en el costado derecho, gira el volante y hace patinar su Avalancha definitivamente es lo que quiero de Navidad.
¡Carambas! Mi hermana no frena se va a estrellar con la pared, todos le gritamos que frene con la palanca, ella grita que no la encuentra, que ella ya sabe cómo detenerse, en eso baja su rodilla izquierda hace contacto con el piso y ante la cara de asombro de todos los que estamos ahí, mi hermana está frenando la Avalancha con la rodilla y además lo está logrando, en eso ya con la Avalancha completamente detenida, mi hermana se levanta y con mucho orgullo nos dice a mis primos y a mí: ¡Vieron como frene!, en eso volteamos a verle la pierna y la tenía toda ensangrentada porque traía unas bermudas que le llegaban arriba de la rodilla, veo a mi mamá que se acerca corriendo y le pregunta: “¿Qué fue lo que te paso?” mi hermana le contesta es que iba muy rápido y de alguna manera tenía que frenar. (Nunca me compraron la dichosa “Avalancha” es el único juguete que me quedaron ganas de mi niñez, ahh y si se preguntan que le paso a mi hermana, pues nada, increíblemente no le quedo ninguna marca física, porque moral supongo que sí, hasta la fecha tiene que cargar con la culpa de que fue la causante que jamás me la compraran; pero todos traemos fantasmas del pasado ,a ella nunca le pudieron comprar su Tondo Malito, un muñequito que le salían puntitos en la cara y con agua se le quitaban).
Ahora tengo 12 años, mi mamá pasa por mí a la escuela, me dice tener una noticia para mí, pero que me la dirá cuando lleguemos a la casa; ya estando ahí, mi mamá se me acerca y me dice: “Mira hijo, ya estas por terminar la primaria y pronto serás un adolescente por eso hice esto, además todo el tiempo te la pasas jugando con tus videojuegos, y creo que los hijos de la señora que limpia el edificio los necesitan más que tú, por eso se los di ellos que todavía son niños”; entro a mi recamara y veo mi closet vacío, mi mamá había regalado todos mis juguetes mis G.I. joes, mis Thundercats, mis SilverHawks ni siquiera me había dejado a mi niño de cobre, mis coches de M.A.S.K., todo se había ido, inclusive mi colección de Star Wars, que cada vez que mi papá le tocaba ir por trabajo a Estados Unidos me traía los muñecos o las naves, y algunas de ellas las tenía con el empaque original (Si mi mamá no hubiera hecho ese acto, probablemente ahorita seriamos millonarios porque los juguetes originales de las primeras películas que salieron, si no has abierto el empaque valen una fortuna).
Quizás en este momento debería estar desolado, triste, o tal vez debería estar llorando, pero la verdad es que no; año y medio antes a este día, mis papás me dieron el regalo más grande que me hubieran podido dar, mi pequeño hermano. Ningún juguete o videojuego se puede comparar a jugar y pasar tiempo con mi hermanito; ahorita mi hermana está por salir de la secundaria, entonces pues ya no me hace tanto caso como antes, aun así le agradezco todo el tiempo y todas las aventuras que vivimos juntos, fue una gran compañera de juego y una gran protectora, una mini-mamá para mí. Pero ahora a mí me toca continuar ese legado con mi hermanito, ahora es mi turno de cuidarlo y ser su compañero de aventura y su protector.
Ahhh y si se preguntan cómo me fue en mi adolescencia con él, lo único que puedo decir, es que fue como una segunda niñez para mí, esta vez aprendí de Pokemones, aprendí de juntar esferas del dragón (Dragon Ball), enseñarme a jugar cartas de Yu-gi Oh! Y esperar que en algún momento de mi deck salieran las 5 cartas de Exodia, el Prohibido y ganar el duelo, pero mientras más jugaba, me daba cuenta que era más fácil que ganará la Lotería a sacar a Exodia. También supe que era ver el laboratorio de Dexter y su latosa hermana Didi, me tocó ver a grandes villanos como Mojo Jojo, el equipo Rocket hasta Pikoro Dai Maku; al igual acompañar a mi hermano a comprar sus Hielocos, jugar con él con su tazos, con el Nintendo 64, el Wii, el Xbox el 360.
Aun con todo esto, reconozco que de vez en vez, regreso a la primaria a comprarme mis cacahuates con sal, chile y limón.
Como conseguir al hombre de tus sueños
Danny Alves.
¡Wow Wow Wow! Que no cunda el pánico, esto no es una declaración abierta al mundo de que salgo del closet, ni es ningún tipo de fantasía homo erótica, ni mucho menos un truco publicitario para tener más lectores.
La razón de mi título es por lo siguiente:
Algunos meses atrás, mi incansable mente se dio a la tarea de resolver un tema imperativo en mi vida. ¿Por qué no estoy viviendo la vida que quiero vivir?, ¿Por qué no tengo el dinero, el trabajo, la pareja, el cuerpo que quiero?
La primera conclusión que llegué era más que obvia, si no tenía, lo ya antes mencionado, era por culpa de las circunstancias, si estuviera en otro país, con otra gente, amigos, personas con quien salir, mujeres, socios; mi vida sería distinta, sería más plena, sería realmente feliz. Y me convencí a mí mismo de esto, busqué en internet un nuevo destino, el cual iba a albergar mis sueños y esperanzas, el poder darme la oportunidad unos meses, de poder vivir en mi pequeño paraíso, y finalmente experimentar la verdadera felicidad, así que escogí un lugar y me dije: “Destino lejano ábreme tus brazos, tu sabrás darme lo que realmente necesito”.
Curiosa frase “Darme lo que necesito”, fue ahí cuando me di cuenta, y siendo honesto conmigo mismo, quizás tampoco a mi familia, amigos, chica con la que salía, les estaba dando lo mejor de mí o lo daba a cuenta gotas. Además, les estaba poniendo una gran carga encima a ellos, los estaba culpando y dando la responsabilidad de que me dieran lo que necesitaba, les estaba dando la responsabilidad de mi felicidad, acto que única y exclusivamente le atañe a una persona tomar el control de esto, que es a mí.
De verdad mi confidente lector, no sabes cómo quisiera decir, que ese fue un momento de iluminación para mí, que a partir de eso todo fue soles, arcoíris y sonrisas, de hecho fue todo lo contrario, fue algo más parecido a estar confundido y apenado conmigo mismo por haberme permitido creer esto, que el ser feliz dependía de otros; después de esto vino la muy difícil aceptación, el reconocer que me había equivocado en muchas cosas, lo principal no hacerme responsable y el no tomar el control de mi vida, dejando que todo lo externo dictará los parámetros de la vida que quiero vivir.
Esto fue mi punto de partida, no porque mi vida fuera insoportable e insufrible, sino porque sabía que podría ser mejor, que podría hacer con ella lo que yo siempre había soñado; a lo que me llevo a la pregunta más fundamental: ¿Qué es lo que realmente quiero?, mi respuesta, poder vivir de una manera real, genuina, abierto, con aventura, haciendo las cosas que siempre quise hacer, en resumen vivir mi vida siendo el mejor “yo”. A partir de aquí me cuestioné, el que me impedía lograrlo, salieron respuestas inmediatas, es que mi familia, la sociedad, mi entorno, la economía, etc.; si de nuevo le estaba dando todo el valor a lo externo , y si ,le atinaste, si no lo había logrado era porque, “yo” quería este tipo de vida, pero no me atrevía a hacer algo distinto para obtenerla, esperando que algún día como milagro, alguien me lo regalará o me lo diera, o de plano viniera el hada mágica y me concediera mi deseo.
Empecé a revisar cada aspecto de mi vida, en lo laboral, soy muy bueno en mi trabajo y me va bien, y me gusta, pero no me apasiona, ahí fue cuando recordé la frase: “Si te dedicas a hacer lo que realmente te gusta y te apasiona, jamás lo verás cómo trabajo”. De ahí surgió mi pregunta ¿Qué es lo que me realmente me gusta hacer?, respuesta rápida y sencilla, escribir, comentar, hablar y crear. Siempre había deseado escribir acerca de lo que leía, vivía, conocía, y hablar de deportes que me encantan, pero pues decidí ser abogado, y pues ahí ya me había cerrado todas mis oportunidades, según yo. De tal manera que aprovechando los adelantos tecnológicos de nuestra era, decidí crearme mi propia oportunidad, invité a otros 10 aventureros, a que expresarán los temas que ellos querían hablar, que compartieran su visión de vida, los temas que siempre habían querido comentar, hice el concepto y ahí nació esta página Xpressa tus Ideas.
Si te preguntas ¿Qué pasó con la abogacía? Sigo trabajando en eso, solo que ahora divido mi tiempo, en mi trabajo y en lo que me apasiona, de verdad ya no sé lo que es dormir, solo sé que me gustaría que el día tuviera más horas, pero también sé que mi creatividad es libre y que nunca había sido tan feliz.
En lo sentimental, pues si había salido con algunas chicas, pero ¿Por qué no había funcionado con ninguna?, todas habían sido maravillosas, todas a su manera me habían querido, ¿Qué era lo que fallaba?, infiel nunca he sido, ni violento, las trataba bien, se divertían, entonces ¿Por qué no tengo el tipo de relación que siempre había soñado?, la respuesta muy a mi pesar, por mi falta de honestidad, y no es que las engañara, ni nada parecido, sino que simplemente nunca dejaba que me conocieran completamente como soy, creaba estos alter egos y ponía estas barreras para evitar que supieran quien verdaderamente soy, les daba lo que creía que a ellas les gustaba, y las hacía felices, pero lo que nunca les día, fue a mí mismo.
Basando una relación, en un simple intercambio de te doy esto, que es lo que creo que quieres, para yo poder recibir esto; nunca dejé que conocieran mi verdadero yo. Ahorita puedo decir, que de la imagen que se enamoraban, era del hombre que sabía que ellas querían, o deseaban, haciendo todo lo posible para asemejarme a ésta (imagen). Creían que había una extraordinaria fortaleza en mí, reflejada en una frialdad de sentimientos, pero lo que realmente había, era un profundo miedo a que me conocieran vulnerable, y cuando sentía que alguna de ellas se acercaba demasiado a ese punto, simplemente huía.
Esta vez quiero una relación abierta, honesta, que sepan quien es mi verdadero yo, mi mejor yo, que este con ella, no porque no pueda vivir sin ella, sino porque no quiera vivir sin ella, que sepa y me conozca tal como soy, con defectos y virtudes, sin máscaras, sin barreras, siendo reales, como alguna vez una amiga me comentó: “El verdadero amor no se basa en el que el otro sea perfecto o tú lo seas, se basa en que aún con defectos y errores, pese más lo bueno que ves en él o en ella y aun así decidas quedarte”.
A partir de ahora no pretenderé ser otra persona para agradarle más a alguna chica, u a otra persona, esta vez quiero compartir mi vida, pero una vida más plena y quiero que ella comparta la suya, no porque tenga algún vacío que ella venga a llenar, caería de nuevo en buscar en el exterior, no, esta vez quiero conocer a alguien completamente y que me conozca, ser parte de su vida y sus proyectos, aportarle algo, todo esto acompañado con las cosas que hago, las cosas que me gustan y las cosas que me apasionan. No sé si con esto vaya a crear una relación más duradera, durará lo que tenga que durar, pero esta vez sí quiero algo real, algo honesto, que se enamoren de lo que realmente soy.
En relación con mi familia, mis amigos, mi país, mis socios, y con todo lo demás, el irme a otro país, al principio todo iba a ser perfecto por la novedad, pero ya pasando ésta, todo empezaría a ser como lo era aquí, porque no es el lugar o le gente los del problema, el problema era yo. Sino había obtenido lo que quería, era porque no me atrevía a realizar ningún cambio, porque no tenía la fuerza de luchar por lo que quiero. Pero no esta vez, esta vez quiero hacer las paces conmigo, esta vez decido tomar el control de mi vida, no volveré a dejar que el miedo, la inmadurez o la estupidez, me detengan.
En este momento elijo el camino que sé que merezco, una vida nueva, decido tomar el riesgo y la aventura de un camino incierto, no quiero continuar desperdiciando mi vida en estar echando culpas, y esperar a que me den lo que creo merecer, esta vez escojo la libertad y la dicha de hacerme responsable de lo que quiero, sé que no puedo volver a ser como él de antes, sé que ahora quiero ser más libre, abierto, honesto.
Esta vez quiero conectar con la gente, mi primer paso es compartir esto contigo, ojalá te sirva de algo mi historia, no lo hago para que me des algo a cambio, como diría Thoureau: “En vez de darme amor, fama o dinero, dame la verdad”, y es lo que hago ahora, decirte mi verdad, las demás en algún momento llegarán como consecuencia no como objetivo principal, si es que tienen que llegar.
Solo puedo desearte suerte en lo que hagas, espero algún día te conviertas en el hombre o la mujer que siempre quisiste ser, que yo por el momento estoy en mi camino de transformarme en el verdadero hombre de mi sueños.
Mr. Come.
Xpressa tus ideas.
Excelente aporte, de verdad la búsqueda de el propio camino puede tardar años, y algunos llegan a llenar ese camino con cosas mas superficiales (dinero, relaciones, etc.) quizas por el enfrentamiento más difícil que tendrás en tu vida, que es contra ti mismo, dependiendo de la fortaleza mental y la inteligencia que tengas, sabrás distinguir lo quieres de lo que necesitas.
ResponderEliminarCreo q lo mejor de tu artículo es la hermosa firma de Dani Alves hahaha
ResponderEliminarLa verdad tu artículo me hace pensar, pues cuántos años tienes sobretodo con las monedas de 200 pesos hahaha pero q bueno q hayas vivido tu época de infante y adolescente de esa manera; recuerdo muchas cosas de las que dices y aveces se extraña, eso quiere decir que hemos vívido bien y bonito. =)
pd. Graaan firma! Visca el Barça!
Pues con todo mi pesar y dolor de mi corazon pues si ni modo tengo que firmar asi para que apuesto! verdad??, y pues mi estimado Dastan no son tantos mis años en esta tierra lo que pasa que como tenía hermanas mas grandes pues me toco vivir cosas que ellas me decian o juguetes que ellas tenian, y te doy toda la razon una niñez fenomenal, a ver cuando unas retas del yu gi oh!!! pero con cartas japonesas en las que exodia vienen 10 en una misma carta jajajaa!!
ResponderEliminarO si quieres algo mas actual pues unas del Fifa, porque creo que el Pes no es lo tuyo jajaja. Saludos y gracias por tu comentario
ResponderEliminarOye que padre infancia, no sabía que eras tan viejo!!!
ResponderEliminarPues mas o menos de sus años mi estimado Carlo, la diferencia es que yo si tengo buena memoria y me acuerdo de todo lo que hice de niño jajajaja
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